
Muchas personas en ocasiones se ven afectadas por circunstancia fortuitas que ocasionan considerables erogaciones de dinero, por lo que surge la necesidad de solicitar ayuda económica, sin saber a quién acudir, por no contar con las garantías necesarias para que una institución de crédito les emita un préstamo.
• El que contrata un préstamo personal, ofrece como garantía, todos sus bienes materiales.
• El titular de un préstamo hipotecario, ofrece además de la garantía personal, el propio bien inmueble hipotecado, que pasará a ser propiedad del banco en caso de no pagar. • Antes de concederle un préstamo, la entidad de crédito realizará un estudio de viabilidad para valorar su capacidad de pago.
• Contempla sobre todo sus ingresos mensuales y sus compromisos de pago, como otras deudas pendientes.
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